Manual de buena práctica en acogimiento familiar
El acogimiento familiar es una medida de protección infantil que proporciona al niño o niña una familia donde vivir y ser protegido y educado, hasta que pueda regresar con su familia de origen, pasar a ser adoptados o independizarse al alcanzar la mayoría de edad. El Acogimiento familiar es un acto solidario, en el que las familias acogen temporalmente en su casa a un/a menor como alternativa a su ingreso en una institución residencial.
El proyecto de Acogimiento Familiar se sitúa dentro de Cruz Roja Española en el Plan de Intervención Social en el Programa de Infancia en Dificultades y, a pesar de que abrió sus puertas hace aproximadamente veinte años, su desarrollo siguen siendo muy lento y desigual entre las diferentes comunidades autónomas.
El ingrediente básico en los programas de acogida es la familia acogedora. Familias dispuestas a hacerse cargo de niños con perfiles y necesidades muy diversas. Pero la tarea de buscar familias no resulta fácil. A los cambios sufridos en la sociedad actual, incorporación de la mujer al mercado laboral, incremento de las familias monoparentales, se une la situación económica actual que sufren las familias y que dificulta la compleja búsqueda.
El acogimiento no es, en ningún caso, una adopción. El objetivo de una adopción es proporcionar un padre y/o una madre a aquellos menores que lo necesiten. La familia acogedora presta su apoyo a un menor y su familia de origen mientras se soluciona una situación problemática temporal que los mantiene separados.
Las familias acogedoras son capaces de acoger en su hogar a un menor y compartir con él o ella su vida familiar, ayudándole a crecer durante un tiempo determinado y muy importante de su vida.
Dentro del proyecto de acogimiento nos podemos encontrar distintas modalidades entre las que se encuentran, el acogimiento con convivencia plena, acogimiento de día, acogimiento de fin de semana y vacaciones y acogimiento de urgencia en el que la integración de los menores se hace de forma inminente, sin un período de adaptación.
Durante el pasado 2009, Cruz Roja gestionó en torno a 1.000 intervenciones de acogimiento familiar trabajando con más de 4.000 personas vinculadas al acogimiento.
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