Alrededor de 2.200.000 niños viven en nuestro país en hogares en situación de pobreza relativa. "La pobreza infantil es una de las caras más dramáticas de la crisis actual", asegura Carlos Chana, responsable de programas de infancia en dificultad social de Cruz Roja Española. A raíz de la crisis, la cifra de población menor de edad en situación de pobreza alcanza ya el 26%, el valor más alto desde 2004.
 
La disminución de la inversión en políticas sociales, educativas y sanitarias precarizan la situación de los niños y niñas, así como de sus familias. Para llegar a fin de mes (pagar el alquiler, luz, agua...), las familias recortan en gastos de ropa, alimentación, ocio... y se agrupan con otros familiares (por ejemplo, los abuelos).
 
Ante esta situación, Cruz Roja Española trabaja para incidir en los factores que condicionan la pobreza y ha puesto además en marcha una estrategia para paliar las consecuencias de la crisis en la infancia y las familias a través de: reparto de alimentos, alimentación infantil, material de higiene personal y del hogar, material escolar, ropa, calzado... así como otras acciones dirigidas a favorecer el éxito escolar como forma de romper las transmisión intergeneracional de la exclusión social que sufren muchas de ellas.
 
En 2011, cerca de 75.000 personas se beneficiaron de estas acciones, que estuvieron apoyadas por el compromiso y la labor de más de 6.000 voluntarios de Cruz Roja.
 
Cruz Roja Española está haciendo especial hincapié en evitar el fracaso escolar ya que es una causa y consecuencia de los procesos de exclusión social. Para ello, con el apoyo de sus voluntarios realiza apoyo escolar en todos los centros infantiles, ludotecas, etc. donde tiene presencia con el objetivo de incentivar el éxito escolar.
 
"La mejor manera de proteger los derechos de los niños es reforzar el entorno social y familiar y el sistema público de servicios sociales", destaca Carlos Chana. Por ello, Cruz Roja Española además de actividades directas de atención de necesidades, "lleva a cabo labores de interlocución con los poderes públicos en las defensa de los derechos de las personas que se ven afectadas por esta situación. Cruz Roja Española, desde el conocimiento que le reporta el trabajo con las personas, realiza aportaciones en la construcción de políticas en favor de la infancia y de la inclusión social de las familias condicionadas por la pobreza infantil, concluye Chana.
 
Entre los menores de edad que viven ahora por debajo del umbral de la pobreza están los hijos de parados de larga duración, jóvenes abocados al sinhogarismo y la exclusión; niños en contextos migratorios, menores inmigrantes no acompañados; o menores que viven en familias monoparentales, o que están afectados por discapacidades o enfermedades de larga duración; niños pertenecientes a minorías étnicas y niños en entornos rurales.