En las playas
Respeta las banderas de señalización
Roja: baño prohibido
Amarilla: baño peligroso (se recomienda que el agua no sobrepase la altura de la cintura)
Verde: baño sin peligro
No intentes nadar en contra de la corriente
Si te sientes arrastrado por una corriente, nada paralelamente a la playa y, una vez que salgas de la corriente, nada hacia la orilla.
Evita bañarte mientras estés "haciendo la digestión"
Es recomendable esperar un tiempo aproximado entorno a dos horas (especialmente tras comidas copiosas) para prevenir el "corte de digestión".
Uso de objetos hinchables
Pelotas, colchonetas y flotadores son muy ligeros y pueden irse fácilmente mar adentro o volcar. Por lo tanto, nunca los utilices si no sabes nadar.
En los ríos y pantanos
Evita bañarte en zonas de riesgo
En ríos de gran caudal, en pozas naturales, o bajo cascadas de agua. Ten en cuenta también que puede haber corrientes y/o remolinos que te arrastren poniéndote en apuros.
Observa la posible existencia de carteles
Pueden anunciar la existencia de algún peligro.
Utiliza un calzado especial para el agua
Evitarás el riesgo de heridas y cortes en los pies.
En las piscinas
Debes tener cuidado con los bordes de las piscinas y las zonas mojadas
Puedes resbalar y causarte una lesión (heridas y contusiones).
Evita tragar agua de la piscina
Los productos químicos que se utilizan para el mantenimiento de las piscinas pueden provocar afecciones gástricas y, en el caso de los ríos o pantanos, tragar agua puede incluso producir infecciones.
Respeta las normas de seguridad de piscinas y atracciones acuáticas
Tu integridad física depende de su cumplimiento. Ten especial cuidado con la utilización de toboganes y trampolines.
Debes cuidar las medidas de higiene básicas
Recuerda que compartes el uso de las instalaciones con otras personas. Dúchate antes y después de entrar en el agua y anima a tus hijos a que acudan al servicio antes de bañarse.